Las placas pueden influir en el clima de forma que cuando se mueven, pueden cerrar o abrir pasos de las corrientes marinas, provocando un cambio en sus direcciones, esto generaría cambios en el clima, el aumento o disminución de aguas cálidas o frías a una zona.
Las corrientes marinas transportan grandes cantidades de agua y de energía en forma de calor, influyendo en la temperatura. Si cambiamos el curso de estas corrientes mediante la abertura de nuevos pasos de agua o del cierre de los existentes, la energía que transporta el agua cambia su destino, afectando a la temperatura media y también a la temperatura puntual del día y la noche.
Las corrientes cálidas producen un aumento de temperatura del aire y mayor concentración de vapor de agua, aumenta la humedad.
Las corrientes frías disminuyen la temperatura del aire y la concentración de agua en la atmósfera, por lo que reduce la humedad.